[Skip to Content]

Infecciones transmitidas por las mascotas

Revisor médico: Mary L. Gavin, MD

Cuidar de una mascota familiar puede ser genial para los niños, ya que les enseña la responsabilidad, el trato amable y el respeto por los seres vivos. 

Pero, al igual que las personas, las mascotas pueden trasmitir infecciones. Aquí encontrará cómo proteger a su familia. 

¿Cómo contagian infecciones las mascotas?

Al igual que nosotros, todos los animales son portadores de gérmenes. Pero las enfermedades más habituales entre las mascotas (como el moquillo, el parvovirus canino y la enfermedad del gusano del corazón o dirofilariosis) no las pueden trasmitir a los seres humanos. 

Algunos tipos de bacterias, virus, parásitos y hongos que pueden trasmitir las mascotas pueden causar enfermedades en los seres humanos a través de mordeduras o arañazos o bien al entrar en contacto con los excrementos, la saliva o la caspa de los animales. Los bebés, los niños menores de 5 años de edad, las mujeres embarazadas y las personas con sistemas inmunitarios débiles tienen un mayor riesgo de desarrollar este tipo de enfermedades. 

Precauciones con las mascotas 

Considere el tipo de mascota, así como el estado de salud y la edad de sus hijos antes de adquirir una mascota. Por ejemplo, los niños con sistemas inmunitarios débiles debido a una infección por el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH), la quimioterapia para tratar el cáncer o la toma de medicamentos esteroides) no deben estar cerca de perros y gatos con infecciones por tiña. Los niños con eccema deben evitar los acuarios. Los reptiles y los anfibios no son una buena idea para aquellas familias donde haya bebés, niños pequeños o personas inmunodeprimidas. 

Perros y gatos

Los perros y los gatos pueden ser portadores de infecciones como:

  • La infección por campylobacter (o campilobacteriosis): Esta infección bacteriana provoca diarrea, dolor abdominal y fiebre en los seres humanos. 
  • La enfermedad por arañazo de gato: Entre sus síntomas, se incluyen la inflamación, las molestias en los ganglios linfáticos, fiebre, dolor de cabeza y fatiga. 
  • La rabia: Esta grave enfermedad es sumamente infrecuente en Estados Unidos, gracias a la vacunación generalizada de perros y gatos. 
  • Las enfermedades trasmitidas por garrapatas: Las enfermedades trasmitidas por garrapatas pueden ocurrir cuando las garrapatas pican a las mascotas en el exterior. Use productos para prevenir las picaduras de garrapata en sus mascotas y elimine con seguridad cualquier garrapata que detecte en ellas lo antes posible. 
  • La tiña: Los niños la pueden contraer al tocar perros y gatos infectados. La tiña puede causar un área redonda, seca y escamosa, rodeada por un contorno rojo y que sobresale en la superficie de la piel. 
  • La toxocariasis: Los huevos de una lombriz parasitaria presentes en los intestinos de gatos y perros pueden pasar de sus heces a la tierra donde juegan los niños. Un niño infectado puede tener fiebre, tos o resuello, agrandamiento del hígado, erupción y ganglios linfáticos inflamados. 
  • La toxoplasmosis: Una infección debida a un parásito presente en las heces de los gatos no suele causar ningún síntoma en las personas sanas, pero puede causar graves problemas en las mujeres embarazadas y en sus bebés. Por eso, las mujeres embarazadas y las personas con sistemas inmunitarios débiles deben evitar entrar en contacto con excrementos de gato. 

Aves

Las aves, incluso las que viven en jaulas, pueden trasmitir las siguientes enfermedades:

  • La criptococosis: un hongo o levadura contenida en las heces de las aves, sobre todo en las de las palomas, puede causar neumonía y meningitis en personas con el sistema inmunitario débil, sobre todos en las personas infectadas por el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) o con el SIDA (síndrome de inmunodeficiencia adquirida). 
  • La psitacosis: hay un tipo de bacteria que puede infectar a las aves, y las personas que entran en contacto con las heces de aves infectadas o con el polvo que se acumula en sus jaulas pueden contraer esta enfermedad, también conocida como fiebre del loro. Sus síntomas incluyen tos, fiebre alta y dolor de cabeza. 

Las aves de corral, como la gallinas y el pato, también pueden ser portadoras de gérmenes nocivos, como la Salmonella. Los niños pequeños y las personas con sistemas inmunitarios débiles no deben tocar estas aves ni cualquier otro tipo de ave de corral. 

Reptiles y anfibios

Los reptiles (que incluyen los lagartos, las lagartijas y las tortugas) y los anfibios (como las ranas, los sapos y las salamandras) no son recomendables como mascotas para niños menores de 5 años debido a la salmonelosis. Esta infección causa síntomas como dolor abdominal, diarrea, vómitos y fiebre. Los niños pequeños se pueden poner muy enfermos y tener deshidratación, meningitis, y septicemia (infección de la sangre) debido a la salmonelosis. 

Otros animales

La manipulación y el cuidado de roedores o peces pueden exponer al riesgo de contraer:

  • La coriomeningitis linfocítica. La gente puede contraer el virus de la coriomeningitis linfocítica cuando se expone a la orina, las heces o la saliva de roedores infectados. Los ratones, los jerbos, los hámsters y los cobayas domésticos no suelen ser portadores de este virus, pero se pueden infectar cuando se relacionan con ratones salvajes en los criaderos, las tiendas de animales o dentro de casa. La coriomeningitis linfocítica puede causar síntomas gripales, como fiebre, fatiga, cefaleas, dolores musculares, náuseas y vómitos, y puede conducir a desarrollar meningitis o encefalitis. Puede causar graves problemas a mujeres embarazadas y sus fetos. 
  • La infección por Mycobacterium marinum. La pueden contraer personas que se cortan o se hacen una herida en la piel y se exponen a aguas contaminadas de acuarios o piscinas. Estas infecciones suelen ser leves y afectan solo a la piel, pero pueden ser más graves en personas con una infección por el VIH, el SIDA o sistemas inmunitarios débiles.

¿Cómo podemos cuidar de una mascota de una manera segura?

He aquí una serie de consejos para ayudar a su familia a cuidar de su mascota con seguridad:

  • En cuanto elijan a la mascota de su familia, llévenla al veterinario para que le ponga las vacunas pertinentes y le haga una exploración física. Programe revisiones regulares y vacúnela según se lo recomiende el veterinario. Así mantendrá sana a su mascota y reducirá las probabilidades de que pueda trasmitir infecciones a su familia. 
  • Enseñe a su hijo a lavarse las manos después de tocar a la mascota, manipular su comida, limpiarle la jaula o los recipientes para los excrementos. Pónganse guantes cuando limpien o recojan los excrementos de su mascota. Si se trata de un ave, pónganse una mascarilla anti-polvo sobre la boca y la nariz cuando limpien la jaula del animal. No deje que sean los niños quienes se encarguen de limpiar la jaula o el cajón de los excrementos hasta que sean lo bastante mayores como para proceder con seguridad y responsabilidad. 
  • Haga que su hijo se lave las manos después de visitar zoológicos infantiles, granjas o las casas de amigos donde vivan animales. 
  • Recuerde a los miembros de su familia que eviten besar a las mascotas o tocarles la boca porque las infecciones se pueden trasmitir a través de la saliva. 
  • Mantengan limpia y libre de excrementos el área donde vive su mascota. Si su mascota hace sus excrementos en el exterior, recójalos y no permita que sus hijos jueguen en ese lugar. 
  • De ser posible, no deje entrar a su mascota a lugares donde se preparen o se manipulen alimentos, y no la bañe ni limpie su jaula o acuario en el fregadero de la cocina ni en la bañera. Lave a su mascota fuera de casa o considere la posibilidad de acudir a un peluquero de animales profesional. 
  • Eviten los animales desconocidos o aquellos que parezcan estar enfermos. No adopten nunca a un animal salvaje como si fuera doméstico.
  • Observe atentamente a sus hijos cuando se relacionen con mascotas. Los niños pequeños son muchos más proclives a contraer infecciones procedentes de las mascotas porque gatean por el suelo, las besan, comparten alimentos con ellas y les meten los dedos y otras cosas en la boca, que puede estar contaminada. 

Hable con el médico de su hijo si tiene dudas o preguntas sobre las infecciones trasmitidas por las mascotas. Si tiene dudas sobre la salud de su mascota, hable con su veterinario. 

Revisor médico: Mary L. Gavin, MD
Fecha de revisión: Febrero de 2022